Raphaël Varane habló del impacto de las conmociones cerebrales en el fútbol. El jugador de equipos como el Real Madrid y el Manchester United reveló a L´Equipe las consecuencias que estas lesiones le han traído a su salud y rendimiento.
Varane y el deseo de prevenir las conmociones cerebrales en el fútbol
El francés de 30 años desea que exista una mejor atención a los futbolistas respecto a este tema, debido a que los repetidos impactos en la cabeza son capaces de provocar microconmociones cerebrales:
«En el Manchester United nos recomendaron no hacer más de 10 cabezazos por entrenamiento… Mi hijo de 7 años juega al fútbol y le aconsejo que no dé cabezazos».
Varane explicó que es importante que los jugadores aprendan a reconocer una conmoción cerebral y cómo tratarla adecuadamente. Por ello, insta a que las cosas cambien en este ámbito y se mejoren los procedimientos de recuperación de los futbolistas después de los partidos.
El francés dijo que tomó conciencia de este peligro gracias al doctor Philippe Malafosse y confiesa que ha tenido varias conmociones cerebrales en su carrera, especialmente en los tres peores partidos de su carrera:
«Sí, he tenido varias conmociones cerebrales. Si repasamos tres de los peores partidos de mi carrera, hay al menos dos en los que había sufrido una conmoción cerebral unos días antes: contra Alemania en los cuartos de final del Mundial de 2014 y con el Real Madrid ante el Manchester City en los octavos de final de la Liga de Campeones 2020».
Los peores partidos en la carrera de Varane
El jugador explicó que en el Mundial de 2014 sufrió una conmoción cerebral en el partido entre Francia y Nigeria, señalando que no recuerda nada del partido luego de ese «shock»:
«Sentí fatiga ocular. Mirando hacia atrás, me pregunto: si hubiera sabido que era una conmoción cerebral, ¿Lo habría dicho, aunque eso significara no jugar este partido? Ni siquiera sé si hubo pruebas 10 diez años. ¿Cómo puedo medir en ese momento mi capacidad para jugar o no contra Alemania en cuartos? Tampoco se puede culpar a los médicos, es una situación un poco complicada. En 10 años, nunca quise hablar de ello porque puede sonar como una disculpa y nunca quise que lo pareciera, porque no lo es».
Luego del partido ante Nigeria, disputó el encuentro de cuartos de final ante Alemania donde, a pesar de sentirse disminuido, jugó bastante bien, aunque perdió un duelo clave ante Mats Hummels que derivó en un gol del equipo teutón:
«Cuando sabes que las conmociones cerebrales repetidas tienen un efecto potencialmente fatal, te dices a ti mismo que las cosas pueden salir muy mal. En ese momento no era un hombre de familia, pero hoy, con 30 años y tres hijos, pienso diferente».
Durante su paso por el Real Madrid en 2020, sufrió una conmoción cerebral tras recibir un balonazo ante el Getafe, lo cual afectó su desempeño ante el Manchester City en la Champions League:
«Lo sentí desde el calentamiento, me dije: despierta. Casi quería darme una bofetada. Durante el partido, mis primeros tres balones fueron técnicamente limpios, pero fue demasiado lento. No podía concentrarme en permanecer en mi partido, era como un espectador. El partido me fue mal (los dos goles encajados se debieron a dos errores individuales de Raphaël) y, en retrospectiva, me di cuenta de que estaba relacionado con el shock que había sufrido… Me cuestioné mucho y, finalmente, me di cuenta de que estos errores insólitos no habían caído del cielo».
Sin duda, Varane pone el enfoque en un tema poco hablado en el fútbol, pero se espera que, gracias a su testimonio y ejemplo, los clubes y selecciones empiecen a tomarse más en serio el tema de las conmociones cerebrales.
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