Max Verstappen ha firmado y sellado una de las temporadas de Fórmula 1 de mayor dominio de la historia, por no decir la de mayor control por parte de un equipo y un piloto. Parecía que aquella temporada de McLaren en 1988 o la de Mercedes en 2014, eran insuperables en cuanto dominio. Pero Red Bull y Verstappen han demostrado que no hay nada insuperable.
Los de Milton Keynes han cerrado el ejercicio con 21 victorias sobre 22 posibles, record absoluto. Por su parte, el tricampeón del mundo Max Verstappen ha embolsado 19 de esas 21 victorias. La supremacía del holandés es tal que ha dejado francamente retratado a su compañero Sergio Pérez, todo un grandísima piloto que tiene además el fuerte de su pilotaje en que es un gran carrerista.
¿Podrá alguien destronar a Max en 2024?
Nunca se puede asegurar lo que va a pasar, pero lo que sí que ha quedado patente, y especialmente, esta temporada, es que Red Bull está inmerso en una nueva era dominante. Por si fuera poco goza de tener en sus filas a Max Verstappen, que por edad, calidad y experiencia está llamado a ser uno de los mejores pilotos de la historia, una lista en la que, por logros, records, títulos y pilotaje ya se le puede incluir.
Con dos armas así y un cambio normativo que llegará en 2026, se podría esperar que 2024 y 2025 podrían ser de nuevo para Red Bull. Si bien es cierto que, como en otras eras de la Fórmula 1 en que ha habido un gran dominio, según pasaban los años, está distancia entre equipos se iba difuminando.
Con la actual era de Red Bull parece que también acontecerá. Mercedes, Ferrari y McLaren han ido poco a poco cerrando el gap con los de Milton Keynes, aunque el salto aún es grande respecto a los austriacos. La calidad de los pilotos y recursos de dichas escuderías le harán seguir recortando distancias y a buen seguro robándole victorias a Red Bull, pero para disputarle al menos, el mundial de 2024, demasiado grande tendría que ser su salto en invierno.
¿Qué hay de Sergio Pérez?
Si desde Mercedes, Ferrari, McLaren o Aston Martin, quienes ya han dicho que en 2024 su salto de calidad no será tan notable, parece que no podrán disputarle la corona al neerlandés Verstappen, ¿lo podrá hacer su compañero?
Sergio Pérez siempre ha sido un piloto especialmente rápido, atrevido cuando debe y buen gestor en carrera. Si bien es cierto que no tan rápido en clasificación. Pero fuera de toda duda queda que es uno de los grandes pilotos de los últimos 15 años. Su balance de logros: 3 poles, 11 vueltas rápidas, 35 podios, 6 victorias y un subcampeonato del mundo. Una notable trayectoria.
Pero Max Verstappen está a otro nivel y no sólo lo ha demostrado con sus logros y su pilotaje, Verstappen es implacable y también ha conseguido vencer psicológicamente a Pérez. Este factor es tan determinante en el deporte como cualquier otro, y la regularidad del mexicano este año se ha visto mermada esta temporada por la increíble superioridad de Verstappen y pequeños detalles, como el del año pasado a finales de temporada no ayudando a Pérez a lograr el subcampeonato de pilotos.
Esta irregularidad de Pérez ha hecho que por momentos, peligrara lograr su subcampeonato. Tuvo una sólida primera mitad de año y un buen final, pero después de verano fue una combinación de resultados cuestionables con fines de semana en los que no pasaba a Q3 el sábado, tenía que remontar el domingo o marcaba un 0.
Así las cosas, mucho trabajo por hacer en pista y fuera de ella para Checo Pérez si quiere plantarle cara a un Max Verstappen que ya se frota las manos de cara a 2024.
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