Daniel «Cari Cari» Noriega fue uno de los grandes delanteros de la historia del fútbol venezolano. Siempre sacrificado, luchador, un guerrero del gol, su nombre forma parte de la épica vinotinto.
Con Venezuela celebró la medalla de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1998, marcando cuatro goles. También brilló en el «Pachenchazo» de 2001, la victoria 2-0 sobre Uruguay por las eliminatorias a Corea-Japón 2002, en el «Pachencho» Romero de Maracaibo.
En total anotó cinco goles en 38 partidos con la Vinotinto.
Noriega formó parte, entre otros clubes, de Mineros, Rayo Vallecano en España, Unión de Santa Fe en Argentina y Llaneros.
«Cari Cari» Noriega conversó con HSM America sobre la selección nacional y su evolución, además de tocar partes importantes sobre su carrera como futbolista.
La Vinotinto
«La selección viene trabajando muy bien. Tiene tiempo para hacerlo. La juventud y la calidad futbolística cada día se notan más. El nivel del fútbol de los que están afuera ayuda a la selección, con mucha entrega, ganas y juego que debe fortalecerse en lo colectivo. Son las mejoras de esta selección. Sabemos que no es fácil en lo colectivo llegar a un objetivo, pero en lo individual el talento está».
¿Qué le falta a la selección?
«Hace falta el colectivo, el grupo, sincronizarlos a todos. Nombrar a uno o a otro sería egoísta, porque me faltaría alguno. Hoy por hoy, ya siendo fanático de la selección, tras tantos años de jugar, lo que ve es que falta un espíritu colectivo, nos hizo mucha falta. Actualmente tenemos muchas más piezas para lograrlo. Hoy son ejemplo Uruguay, Perú, Paraguay siempre, que son selecciones que piensan en lo grupal».
Los mejores momentos de Noriega
«Son momentos inolvidables los pasos por Mineros, Unión de Santa Fe, siempre jugando con mucha intensidad. De los partidos que nunca olvidaré está el juego que le ganamos a Colombia en Barranquilla. Ese encuentro nos sirvió de motivación. También el Centenariazo, ganarle a Uruguay en su casa y con sus figuras. Derrochamos sacrificio siempre».
Las expectativas de Venezuela
«Hoy por hoy hay talento, variedad en las posiciones, con mucho nivel. Ya queda de parte del cuerpo técnico ubicar las piezas y darle a los venezolanos esa alegría que buscamos durante tantos años, como es la de ir a un Mundial. Es el sueño de todos los venezolanos».
Sus entrenadores modelo
«Todos pusieron su granito de arena para ayudar en mi vida personal y en mi carrera futbolística. Mario Zanabria, José Omar Pastoriza, Raúl Cavalleri, Eduardo Borrero, Richard Páez, todos fueron técnicos del que uno sacó el mejor provecho. De todos aprendí, me enseñaron mucho, me hicieron mejor persona y jugador. Uno lo agradece mucho».
Su actualidad
«Haber tomado la decisión de retirarme temprano me hizo alejarme del fútbol durante muchos años. Pero hace cinco años comencé a trabajar con fútbol menor. Trabajé en segunda división, hoy estamos con Atlético Furrial. Creo que la tarea del entrenador es mucho más dura, no es solo dirigir, sino entrenar y educar».
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