Al fin de semana siguiente a la clasificación de Real Madrid y Juventus a la final de Cardiff de la Champions League, ambos equipos deben mantener en lo más alto su exigencia entre la fecha y el 3 de junio, día de la definición del certamen europeo.
La «Vecchia Signora» desperdició la gran oportunidad de sentenciar la Serie A luego de caer 3-1 ante la Roma, su más cercano perseguidor.
Lo que parecía una cómoda ventaja del cuadro de Massimiliano se redujo a apenas cuatro puntos (85 unidades por las 81 de los romanos) en dos partidos, el empate anterior con Torino y esta caída, con dos fechas por jugar.
¿La ventaja? El par de duelos que le restan a los turineses son en teoría accesibles ante Bologna y Crotone.
Pero esta semana tiene una prueba clave: la final de la Copa Italia ante Lazio este miércoles para mantener vivo el sueño del triplete.
Para los merengues el panorama es aún más apretado. Su toma y dame con el Barcelona no para tanto que ambos golearon 4-1, los blancos a Sevilla en casa y los blaugranas a Las Palmas en condición de visitante.
El gran punto de inflexión del campeonato español también será en el transcurso de esta semana. Los de Zinedine Zidane chocarán con Celta de Vigo en el partido pendiente que les queda: si vencen en Balaídos, La Liga se confirma que estará en sus manos.
Luego de eso llegará la jornada final en España en la que rivalizarán con Málaga y tendrán dos semanas de descanso para preparar la final de Champions.
Lo cierto es que ninguno de los dos equipos puede aflojar ni exagerar en rotaciones. Ambos entrenadores llegarán con su plantilla con una gran carga de minutos. En Cardiff se vivirá el momento cumbre.
