Tras un año lleno de decepciones para Lewis Hamilton en su primera temporada en Ferrari, todo parece indicar que será otro campeón del mundo que no podrá llevar a la escudería italiana a un nuevo título. Si bien el heptacampeón del mundo logró una pole position y una victoria sprint en China, su debut con los italianos es visto como un fracaso.
Aunque hay esperanza para 2026, debido al gran cambio de reglamento de la F1, lo cierto es que hay muchos que dudan que Hamilton logre sacar a Ferrari de su sequía en el campeonato de pilotos, el cual no ganan desde Kimi Raikkonen en 2007.
Uno de los escépticos es el exjefe de Ferrari, Maurizio Arrivabene, quien dirigió a la Scuderia entre 2014 y 2019, y quien detectó en Hamilton una forma de trabajar que le recordó a Sebastian Vettel y que no funcionó en Maranello.
Arrivabene critica a Vettel y Hamilton
El italiano señaló las declaraciones que hizo Hamilton en julio, cuando reveló haber redactado numerosos informes destinados a los ingenieros de Ferrari.
“Después de las primeras carreras, redacté un documento completo para el equipo”, dijo Hamilton en julio. “Luego, durante esta pausa, envié otros dos documentos. Así que vine para abordar estos puntos. Se trata en parte de ajustes estructurales que debemos realizar dentro del equipo para mejorar, así como de todas las áreas en las que queremos progresar”.
Arrivabene afirmó haber vivido lo mismo con Vettel, describiendo sus informes como “prácticamente inútiles” y que estos tuvieron un efecto negativo a nivel de la relación con los ingenieros.
“Sebastian Vettel también enviaba ese tipo de dossiers”, contó el directivo a Sky Italia. “Escribía, hablaba y lo compartía todo. No quiero decir nada malo sobre Sebastian, pero cada uno debería ocuparse de lo suyo. Cuando un piloto se pone a hacer de ingeniero, se terminó. Después de eso, realmente se acabó”.
“Los pilotos pasan dos o tres días en el simulador y de ahí sacan una impresión general, pero el diablo está en los detalles. Cuando el coche está en pista, el piloto debe aportar un feedback técnico pertinente para que los ingenieros puedan identificar mejoras, especialmente cuando hay potencial”, concluyó Arrivabene.
Ferrari se niega a escuchar a sus pilotos
Las palabras de Arrivabene contrastan mucho con las del actual jefe de equipo de Red Bull, Laurent Mekies, quien destacó la importancia de escuchar a su piloto, Max Verstappen, para mejorar su auto y poder luchar por los campeonatos.
“Por mucho que todos nosotros hayamos pasado demasiados años en la Fórmula 1 y hayamos visto a Max lograr cosas increíbles, todo lo que puedo decirte es que cuando tienes la oportunidad de trabajar de su lado del paddock, aun así te deja boquiabierto”, dijo el francés a Motorsport.com.
“Obviamente ustedes escuchan mucho de lo que se dice por la radio, pero no escuchan todo”, señaló. “Así que la calidad de su feedback técnico y el nivel de sensibilidad que tiene en el auto [son muy impresionantes]”.
“Solíamos tener esta broma dentro del equipo en la que decíamos que es el mejor sensor que tenemos en el auto. Posiblemente también el más caro, pero esa es otra cuestión”, bromeó Mekies. “No se escapa de ninguna reunión para ir a hacer otra cosa, sino que se integra completamente en ello. Entre carreras hace sim racing, probablemente con alguna idea en la cabeza sobre lo que todavía puede aprender o mejorar de su conducción, o sobre la preparación para la próxima carrera”.
“Lo hace con la capacidad de involucrarse plenamente en el proyecto, no de juzgarlo desde afuera”, explicó. “Sino tratando de encontrar las claves correctas para asegurarse de que todos empujemos en la misma dirección y de que todos apreciemos lo que él intenta transmitirnos a través de la comunicación”.
No cabe duda de que escuchar a Verstappen ha sido clave en el éxito de Red Bull. Si bien es claro que sin ingenieros no hay autos, no hay mejor crítico que la persona que los maneja y más si se trata de grandes campeones como Vettel, Hamilton o Alonso. Este último también pasó 5 temporadas sin lograr llevar el título a Maranello.
Ferrari parece ser un equipo centrado en complacer más a sus ingenieros que a sus pilotos y mientras esta idea no cambie, los egos no desaparezcan y no haya un verdadero entendimiento entre todas las partes involucradas, será complejo que los italianos vuelvan a ganar campeonatos en la F1.
Para 2026, 18 años habrán pasado desde el último campeonato de Ferrari en la máxima categoría y si los ingenieros y directivos en Maranello piensan como Arrivabene, la espera podría ser mucho más larga.
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