Entre 2015 y 2018, los Golden State Warriors se proclamaron como la nueva dinastía de la NBA, levantando tres veces el trofeo Larry O’Brien.
Esa senda victoriosa terminó en las Finales de 2019, cuando cayeron en seis juegos contra unos sorprendentes Toronto Raptors. A partir de ese momento, la franquicia de San Francisco pasó por dos temporadas complicadas.
El adiós de Kevin Durant y la grave lesión de Klay Thompson que lo marginó por dos temporadas mermó al equipo de Steve Kerr. Solo contaba con Stephen Curry como figura referencial, el desempeño de Draymond Green no fue imperial y la franquicia se enfocó en rearmar al equipo con piezas que gozaran de juventud.
Esta noche de 16 de junio, luego de dos campañas de oscuridad, la luz hacia un nuevo anillo de la NBA acompaña a los Warriors. Solo necesitan una victoria en el TD Garden sobre Boston Celtics para ganar su cuarto anillo en ocho años, el séptimo en total. La serie está 3-2 a favor de los de la bahía.
Los renovados Golden State Warriors
Los actores principales siguen siendo Curry, Thompson y Green, pero este equipo de Golden State cuenta con actores de reparto que han ayudado en momentos clave, especialmente cuando se trata de anotar puntos urgentes y defender para retomar ventajas.
El escolta Jordan Poole es, para muchos, el joven más sensacional que tienen estos Warriors. Llamado el tercer Splash Brother por su 39.2% de efectividad en tiros de tres.
Por su parte, Andrew Wiggins parece haber encontrado su lugar en la NBA: es el alero del quintento de Kerr, no solo involucrándose en labores ofensivas, sino que ha sido clave al marcar, recuperar pelotas y atrapar rebotes.
Hay otros nombres que valorar, como el trabajo silencioso que hace el centro Kevon Looney. Sin balón, ha demostrado su valía como pívot, con coberturas y pantallas fundamentales, importante debajo del aro para mantener la posesión y protegiendo a los bajitos que atacan el aro.
Otros que han aportado desde la banca son Gary Payton II y Otto Porter Jr. Steve Kerr ha sabido emplear nombres del banquillo como nunca antes lo hizo, ni siquiera en las Finales en las que terminó siendo campeón. Son los menos favoritos del público, pero han aprovechado sus minutos para apoyar en defensa.
El de esta noche será el Juego 6, por lo que a los Warriors le quedan dos oportunidades para ganar. En frente, tiene a unos Boston Celtics feroces en defensa, con jugadores que, cuando se inspiran, pueden combinarse fácilmente para 100 puntos. Veremos de qué lado estará la inspiración…
¡¡ J U E G O 6⃣ !!#NBAFinals pic.twitter.com/YFX9VRLlRb
— NBA Latam (@NBALatam) June 16, 2022
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