Luego de 18 años y un escandaloso episodio Argentina y Chile se volverán a ver las caras en la semifinal del Grupo 1 de la Zona Americana de la Copa Davis, en lo que sin duda será un choque de alto voltaje.
Atrás quedo aquel capítulo del año 2000 cuando la serie disputada en Parque O’Higgins no pudo completarse luego que los jugadores argentinos recibieran una descomunal descarga de sillas por parte del público chileno.
Historia y testimonios del enfrentamiento
Ahora, una nueva serie entre ambos cuartetos se disputará desde este viernes hasta el sábado en la ciudad de San Juan.
Argentinos y Chilenos se han visto las caras en 16 oportunidades. Ambas selecciones han ganado en ocho ocasiones, por lo que la serie de este 2018 pondrá por encima en el historial personal al ganador.
¿Qué selección llega con mejor presente al enfrentamiento?
En las primeras de cambio la serie se antoja muy pareja. Si bien es cierto que en la Copa Davis cualquiera le puede ganar a cualquiera, ambas selecciones cuentan con herramientas importantes para llevarse el cotejo.
Sin embargo, por tener la ventaja de jugar en casa y contar además con Diego Schwartzman, la Argentina salta a la pista como la máxima favorita.
El equipo argentino lo completan Guido Pella, Nicolás Kicker, Máximo González y Guillermo Durán. Siendo estos dos últimos probables participes del choque de dobles. Por lo que faltaría definir quienes estarían disputando los partidos de sencillos.
Por el lado visitante, Nicolás Jarry, sensación durante los últimos torneos de la ATP comanda a la joven camada chilena. Christian Garin, Marcelo Barrios y el experimentado en esta competencia Hans Podlipnik Castillo cierran el equipo que capitanea Nicolás Massú.
Analizando por encima la serie y cada enfrentamiento, el partido de dobles podría inclinar la balanza hacia alguno de los lados. Ya que es muy probable que tanto Schwartzman como Jarry consiguen llevarse su partido de singles, dejando la escena servida para el segundo día de competencia.
Tomando el punto anterior como base fundamental para lo que será la serie, las raquetas número uno de ambos países deberán saltar a la pista con una misión diferente el día sábado. Uno tendrá que ganar para mantener la serie con vida y el otro rematar lo hecho el viernes y a primera hora de ese mismo día.
Aunque todo lo antes explicado tenga lógica, la Copa Davis nos ha enseñado que las sorpresas están a la orden del día, por lo que habrá que esperar al final de cada partido para conocer el panorama que se presenta.