El UFC vive, por ahora, su mejor fase. Después de anotar cuatro de las cinco ventas más grandes de pay-per- view en su historia en los últimos diez meses, además de lograr la realización de peleas de MMA en el estado de Nueva York, el espectáculo dirigido por Dana White se vendió por cerca de 4,2 billones de dólares. A esto se le une el ritmo vertiginoso de los nuevos grandes nombres garantizados como inversores.
En el diario estadounidense “The Wall Street Journal” el jueves (29), la WME-IMG (la empresa que compró el UFC en julio) anunció que 23 estrellas, incluyendo atletas, actores y celebridades, invirtieron unos pocos millones de dólares y se convirtieron en accionistas de la organización.
También de acuerdo con la publicación, la lista, que cuenta con Ben Affleck, Tom Brady, Robert Kraft, Mark Wahlberg, Adam Levine, Cam Newton, Serena Williams, Venus Williams, Maria Sharapova, The Weeknd, Anthony Kiedis, Flea, Li Na, Guy Fieri, Calvin Harris, LL Cool J, Michael Bay, Trey Parker, Tyler Perry, Jimmy Kimmel, Rob Dyrdek and Sylvester Stallone.
Con unas ventas de pay-per-view cada vez más altas y la popularidad de fenómenos tales como Conor McGregor, Ronda Rousey y Georges St-Pierre en acción, el torneo de MMA más famoso del planeta parece estar a punto de llegar a un nuevo nivel de popularidad. Y para ello, la WME-IMG y el conglomerado de entretenimiento estadounidense deben ser fundamentales. Con conexiones en la WWE, NFL y algunas de las grandes producciones de Hollywood, los nuevos propietarios del evento deberían traer más noticias pronto.