Andrés Ponce anotó su primer gol con el Akhmat Grozny ruso este sábado, en el empate a uno ante Krylya Sovetov por el torneo local.
Para Ponce termina la sequía desde su cambio de club. La pasada temporada sumó cinco dianas con el Anzhi Makhachkala, la máxima cantidad en su carrera en primera división.
No obstante, la adaptación a su nuevo equipo ha sido ardua. Acumula siete partidos, de los cuales en solo dos ha sido titular, en total 232 minutos de juego.
Ponce celebra su trabajo
«Es algo en lo que he venido trabajando siempre», afirmó a HSM Deportes desde Rusia. «Tal vez no se nos han dado las cosas de la mejor manera, en lo personal y en lo grupal, ya que es un nuevo equipo y ha cambiado todo. Pero seguimos luchando y trabajando».
El zuliano describió la acción del tanto, al minuto 27 del compromiso: «El portero se quedó un poco y yo, con la velocidad que llevaba, le gané la posición del balón, estuve bastante atento para ganarle la jugada al final».
Maksim Karpov, al 90+4, anotó el gol del empate.
Ponce terminó con el MVP del partido.
«El gol me llena de confianza», recalca Ponce, «pero en lo personal el objetivo aún está lejos. Tengo la ilusión de obtenerlo. El gol me alegra, me motiva, pero queda mucho por luchar para conseguir más cosas, más goles, que es lo importante».
Una situación peligrosa
El equipo de Grozny se sitúa en el puesto 14 (repesca para la permanencia) del torneo, con nueve unidades. Lidera Zenit de San Petersburgo con 23 puntos.
«Siempre uno como delantero debe esperar que suceda cualquier tipo de cosas dentro del área. Gracias a Dios estuve en el lugar indicado para poder hacer el gol», afirmó.
En el Akhmat también se encuentra el defensor venezolano Wilker Ángel, que disputó los 90 minutos y recibió una amarilla.
