Napoli tenía todo servido para la fiesta perfecta: Inter había vencido a la Lazio y solo bastaba un triunfo sobre la Salernitana en el Diego Armando Maradona para levantar el Scudetto 22-23.
Pero Boulaye Dia tenía otras intenciones. El senegalés anotó al minuto 84 el gol del empate a uno este domingo, por la fecha 32 de la Serie A, que deja para otro día la celebración napolitana.
El uruguayo Mathías Olivera había adelantado a los locales al minuto 62 del cotejo.
Los dirigidos por Luciano Spalletti siguen líderes con 79 puntos, 18 por encima de la Lazio. Juventus está a 20 puntos del cuadro sureño. El objetivo: el tercer título en la historia del club, luego de los dos obtenidos con Maradona como líder (1987, 1990).
La frustración de Napoli en casa
El resultado de la primera hora beneficiaba enormemente al Napoli, con Inter ganando 3-1 a la Lazio gracias al doblete de Lautaro Martínez y gol de Robin Gosens. Con un triunfo, el título ya estaba en el bolsillo.
Victor Osimhen, al minuto 2, cabeceó con potencia, pasando la pelota cerca del arco del mexicano Guillermo Ochoa.
El nigeriano buscaría por la misma vía al 7 y al 23, pero Ochoa tapó ambas oportunidades.
Ochoa volvió a ejercer de villano para los napolitanos, bloqueando un endemoniado remate de Frank Zambo Anguissa al 42.
Vía aérea llegó el 1-0 para Napoli, con un cabezazo de Olivera tras centro de Giacomo Raspadori, al minuto 62 del compromiso.
Eljif Elmas, Osimhen y Khvicha Kvaratskhelia pudieron ampliar las distancias, pero todos sus intentos fueron erróneos por centímetros.
Cuando ya comenzaban a preparar los fuegos artificiales, apareció Boulaye Dia. El senegalés entró de derecha hacia el centro, metiendo un zurdazo, cruzado, para el 1-1.
Napoli contará con una nueva oportunidad para el título el jueves, cuando enfrente a Udinese de visitante. La ciudad no quiere otra desilusión como la de este domingo.
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