Que un equipo gane un título local merece toda la felicidad del mundo: es el más consistente entre una veintena de conjuntos, el mejor de su país. Pero para el PSG, es el más agridulce de los títulos.
Los de Mauricio Pochettino se alzaron con el campeonato francés luego de igualar a uno con Lens, este sábado, por la jornada 34 de la Ligue 1. Alcanzaron 78 puntos, a falta de cuatro jornadas para el final.
Leo Messi anotó el gol para abrir el marcador en el Parque de los Príncipes, igualando Corentin Jean.
En medio del clima de tensión entre Nasser Al-Khelaifi, presidente del club, y los fanáticos más radicales del equipo, éstos se retiraron del campo al minuto 75. Finalmente, no festejaron con los jugadores el campeonato.
“Fue surrealista que parte del público abandonara la grada”, dijo Neymar al término del encuentro. El brasileño, uno de los más pitados por los propios seguidores parisinos, lanzó además: “Se van a cansar de pitar, porque me quedan tres años más de contrato., Me voy a quedar, así que o se detienen o tendrán que tomar aún más aire”.
Messi, en la mira de los aficionados del PSG
El conjunto parisino ha sido manejado siempre como un álbum de cromos, o como un equipo de videojuegos. Esta temporada ficharon no solo a Messi, sino a Gigio Donnarumma, Georginio Wijnaldum, Achraf Hakimi y Sergio Ramos.
Su objetivo era ganar la Champions League.
Pero no lo pudieron alcanzar: fueron eliminados en octavos de final por el Real Madrid (global 3-2), habiendo ganado la ida 1-0. Salvo Kylian Mbappé, que sigue siendo el niño mimado de Francia, todos los jugadores del PSG están en la mira de los fanáticos.
Todos, incluyendo Messi.
Para el argentino, la temporada ha sido algo traumática. Alejado del Barcelona por primera vez en casi dos décadas, ha tenido que acostumbrarse a una nueva liga, mucho más física, y en un equipo donde debe trabajar con otras estrellas.
En números, Messi está mostrando una nueva realidad: la del pleno asistidor. Suma 13 habilitaciones en la campaña local, por apenas cuatro goles anotados. Para el hombre que marcó 91 tantos en el año natural 2012, que conquistó seis Botas de Oro y que se cansó de hacer goles extraordinarios como blaugrana, es una situación atípica.
Si en la capital francesa esperaban que el argentino cargara con el peso ofensivo del club, se equivocaron.
Así, los líderes anotadores del PSG en la Ligue 1 2021-22 son Mbappé con 22 tantos, Neymar con 11 y Danilo Pereira con 5. Messi tiene la misma cantidad que Marquinhos y Mauro Icardi: cuatro.
Tampoco es el líder en asistencias del equipo: lo es Mbappé, con 14.
Mbappé quiere nuevos aires en su carrera
La posible salida del atacante campeón del mundo en 2018 es otra de las situaciones que critican los aficionados. Real Madrid lo espera con los brazos abiertos, y aunque están aún en conversaciones sobre su futuro, no hay certeza de que Mbappé continúe a los pies de la Torre Eiffel.
En medios franceses se habla de que Kylian quiere un nuevo DT. De la mano de Mauricio Pochettino, el PSG es un equipo más, sin llegar al potencial ofensivo de un club con tantas figuras. Además, la eliminación en Champions sigue siendo una espina en el corazón parisino.
Todo esto genera que la Ligue 1, en lugar de ser celebrada por todo lo alto, sea “un torneo más” para la vitrina parisina. Sin importar su peso histórico, puesto que al ser la décima el PSG alcanza al mítico Saint-Etienne en la cima de los clubes más ganadores del torneo.
Nada de esto vale en un París aburrido de sus futbolistas.
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