La fugacidad de la temporada de grandes ligas no la exceptúan de vivir momentos memorables. De hecho, las hazañas quedarán envueltas por siempre en medio del contexto atípico y serán recordadas con un encanto especial. Este no-hitter, es la prueba.
La alegría parece haberse posado en el Sur de Chicago, y con la noche mágica de ayer, Lucas Giolito se quedará en los corazones pati-blancos por mucho tiempo. El tiempo justo que merecen los que hacen historia, escribiendo su nombre al lado del juego sin hits ni carreras número 19 de la franquicia, el 304 en las mayores, primero de esta temporada, y por supuesto, el único sin fanáticos presentes.
La receta de un no-hitter
Los ingredientes del encantamiento hablan del dominio, fueron necesarios 101 lanzamientos, agregó 13 ponches para imponer un nuevo record en el apartados de los sin hits en el quipo. Puso un toque de sal al otorgar un boleto en la cuarta entrada que evitó la perfección. Y por supuesto… fue necesaria la pizca de tensión, indispensable en este tipo de desafíos.
Que llegó justo en el último lanzamiento del partido, en cuenta de 0-2, cuando Erick González conectó la bola con fuerza hacía el jardín derecho. A simple vista parecía acabarse la magia, pero Adam Engel se quedó con la línea, o la línea con Adam. Lo cierto es que fue la cereza del no-hitter recién sacado del horno.
Giolito indicó después del juego MLB Network que:
Eso es parte de un juego sin hits. Siempre hay una obra de teatro, ¿verdad?
¡Cuánta razón! Aunque el teatro parecía hacer más referencia al ruido de los fanáticos falsos, que fue en aumento toda la noche «Se sentía como en cada entrada, el ruido de la multitud se hacía más fuerte. En la novena entrada, el ruido de la multitud se volvía loco. Se sentía como si hubiesen 35.000 personas aquí». Agregó el As, con alegría.
¿De qué diablos estas hablado?
Pasó por su mente en algún momento lanzar un juego sin hits ni carreras en las mayores. Una hazaña de tal magnitud puede ser el sueño de cualquiera, y sí, lo imaginó. Sin embargo, agregó después del partido: “Si me hubieras preguntado eso en el ’18, hubiera dicho “¿De qué diablos estás hablando?”.
2018, fue el año de la fatalidad para Giolito, cuando ocupó el liderato de la liga en el indeseable apartado de las carreras permitidas (128) y boletos otorgados (90), cerrando el año con efectividad de 6.13. ¿Uno más del montón? Seguro, ¿Acaso tiene algo en la bola? Los malos comentarios llegaron de todos lados, especialmente a través de su cuenta en instagram.
Seguro después de un año así quieres desaparecer, pero decidió hacer el trabajo diferente. Y volvió con fuerza, en 2019, su efectividad bajó a 3.19, ocupó el puesto 19° en la gran carpa y fue elegido a su primer juego de estrellas. Ahora, el joven de 26 años es considerado el “As” de la rotación, posee marca de 3-2, efectividad de 3.09, y 58 ponches en 43⅔ entradas, con promedio de bateo permitido de .180 en la presente zafra.
Giolito dijo además, una frase que motiva e invita a seguir adelante pese a los golpes.
Que me pateen el trasero una y otra vez era exactamente lo que necesitaba para hacer los cambios necesarios en sí mismo para poder realizar mi verdadero potencial.
Un mensaje emotivo
Lindsay Frost, madre de Lucas, escribió un mensaje a su hijo en twitter instantes después de completar la hazaña.
Giolito completó hizo ante los Piratas, que fueron blanqueados por segunda noche consecutiva, y recibieron el 7mo no-hitter en su historia. Los pati-blancos se impusieron 4 carreras por 0. Y marchan segundos en la central de la Liga Americana, empatados Cleaveland.
En una temporada normal, quizá no tendrían aspiraciones a octubre, pero ahora, tras la mezcla de las joyas de pitcheo con la explosión de sus bates, los Medias Blancas de Chicago juegan en una temporada marcada por grandes posibilidades, un juego donde los sueños se hacen realidad.
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