Durante muchos años, Kobe Bryant pasó por ser uno de los mejores defensores que patrulló la NBA. Como atacante era un depredador, pero como defensor, casi inexpugnable, lo que le conferían la etiqueta de ser uno de los más completos de los últimos 30 años. Por eso, cuando aparece un jugador que parece imparable, como LeBron James en estos Playoffs, bueno es conocer la opinión de uno de los jugadores que quizá sí le hubiera parado. Al menos, ‘La Mamba’ dice conocer la fórmula para hacerlo.
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Su lado izquierdo «Es fundamental tapar su lado izquierdo», decía Kobe a Fox Sports Radio. «Todas las grandes canastas que ha logrado las hace comenzando el movimiento hacia su izquierda. Lo que hace es iniciar su movimiento con la zurda, parar, levantarse y tirar. Eso es lo que haría, interrumpir su camino hacia la izquierda. Aunque no es fácil. Es sorprendente como domina el tiro desde el poste o a la salida de dribling con su mano izquierda. Pero si tuviera que pararle hoy, le obligaría a hacer algo diferente e impedir el primer bote con la izquierda».
Como LeBron o Michael Jordan antes, Kobe Bryant también era capaz de dominar el partido desde muchas facetas, especialmente llegados los Playoffs: «Controla el tiempo de los partidos a su antojo. Un partido, sobre todo en los Playoffs, está lleno de detalles. Lo que él hace es controlar casi todos. Eso es algo muy difícil, pero él está capacitado para hacerlo en la postemporada».
Observador de la Liga ahora, aunque protagonista no hace mucho, Kobe se atreve a hablar de la progresión de LeBron, al que tuvo que sufrir durante muchas temporadas: «Está jugando de forma diferente. Ahora sabe como dosificar sus energías. Entiende como hacerlo. En el pasado le veías correr sin descanso, pedir pantallas y bloqueos desde todos los ángulos, jugar muy lejos del aro y penetrar constantemente. Ahora opera más en las esquinas, cerca de la línea de tiro libre, más cerca de la zona. Desde esas posiciones le basta con una par de pasos para llegar a la canasta tras dribling. Puede jugar más cómodo. Pero no era así cuando llegó a la Liga».
Con esto dicho por kobe, será que:
¿LeBron cambió su estilo de juego?
Siempre se ha dicho que LeBron James quiere estar rodeado de tiradores. Su esquema mental idóneo, y el que mejor le viene en pista, se ha definido con él al mando y los demás jugadores abiertos. Pues bien, eso es justo lo que podría estar cambiando ahora.
Vaya por delante que no se trata de afirmar qué creemos que le conviene más, sino de entender qué quiere él. Son 33 años con 15 de ellos jugando al máximo nivel en la NBA, y casi siempre sufriendo el desgaste no solo de ser el líder anotando, sino dirigiendo e incluso defendiendo –aquel tapón a Andre Iguodala–. Con esa trayectoria rubricada, Chris Broussard de FS1 asegura que El Rey se estaría planteando dar un paso lateral.
Según una fuente del citado periodista, LeBron estaría interesado en jugar alejado del balón, algo que ocurriría justo en Philadelphia. James, acostumbrado a hacer de playmaker, dejaría así ese peso a otro compañero, en este caso Ben Simmons, para disminuir las ocasiones en las que él inicia el juego. Y todo ello apoyado en la creencia de que James ha asumido ese rol a lo largo de los años porque no contaba en sus equipos con un creador de juego, y no porque él realmente quisiera que fuese así.
Cuesta imaginárselo. Si hay algo en lo que ha crecido LeBron con el paso del tiempo es en su lectura del juego; tanto es así que ya no solo da asistencias, sino que entre ellas encontramos pases que hubiese sido imposible intuir hace por ejemplo 10 años. Y ya no es que dé esos pases de canasta, sino que lo hace con una regularidad que asusta. Ya no te vale con hacerle un dos contra uno ni con flotarle, solo te sirve tener suerte y que tenga un mal día.
LeBron es de esos pocos jugadores cuya personalidad y talento van al unísono para que su rol en un equipo solo pueda ser el de líder. Y como tal, con el peso de quien debe dirigir y definir, tenerle en una esquina o haciendo un corte para recibir bajo canasta suena más a excepción que a regla. Que quiera delegar algo de responsabilidad puede ser, pero el segundo plano nunca estará listo para encuadrarle.
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