Mala suerte para Indiana lo de ser uno de los equipos revelación y más agradecidos de ver esta temporada y cruzarse a las primeras de cambio con LeBron y unos Cavs con altas y bajas.
Los Cavs han tenido momentos de todo tipo durante el curso y, aunque pueda parecer un contrasentido decirlo de un equipo de 50 victorias, han abundado más los momentos de bajas que los momentos de altas. Pero no será aquí donde alguien dude de LeBron James. El mejor jugador de la liga llega a playoffs dispuesto a alcanzar las Finales de la NBA por octava vez seguida y su despliegue a lo largo de todo el año deja entrever que veremos a un LeBron en modo superlativo.
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Los Cavs cambiaron a mitad de curso su equipo de forma completa pero pese a esto sigue siendo un bloque marcado por sus deficiencias en defensa. Son el octavo equipo con peor defensive rating, solo superados por los Wolves como conjunto de Playoffs. Si a ello sumamos las altas y bajas que ha tenido en regular season Kevin Love, la desaparición en combate de Tristan Thompson, y las dudas que han dejado algunos de sus refuerzos, el panorama no es bueno a prori para Cleveland.
Pero hay dos palabras que cambian siempre la película en Ohio, y en especial en la mente de LeBron: son Playoffs. LeBron, que ha realizado la que puede que sea su mejor temporada en lo individual, superando a Jordan en varios récords y siendo para muchos el MVP honorífico de la temporada, redobla sus esfuerzos en estas fechas, lo que empieza por defender con verdadera intensidad (y eso que nunca se puede decir que LeBron pase un partido sin defender).
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Los Pacers han ganado 48 partidos y la serie de la temporada a Cleveland cuando muchos creíamos que serían carne de la lotería tras deshacerse de Paul George. Indiana no tenía nada que perder a principios de temporada ni ahora tampoco ya que la quinta plaza del Este es un premio de oro para ellos. Saldrán a por todas y Victor Oladipo jugador más mejorado del curso hasta el nivel All-Star, asegura algún que otro partido explosivo. A su lado están Turner, un Sabonis cada vez más hecho y veteranos como Thad Young o Stepehnson. Los Pacers son uno de los equipos que menos tiran de tres de la liga. Juegan juntos, crecen juntos, y son felices juntos. Y eso también es un arma.
Sin Irving, LeBron nada escaso de jugadores que puedan aportar puntos y desequilibrio desde el perímetro. No dudamos de la calidad de Love, pero un proyecto ganador necesitar un pilar más. Ahí el perfil del ex de Utah quizá sea el que más se asemeje. Si Hood da un 90% de su mejor versión, la que vimos el curso pasado, Cleveland tendrá sobre todo un jugador en el que confiar algunas posesiones y dar descanso al Rey.
En Indiana por su parte se debe tener en cuenta todos los intangibles de la franquicia, su arraigo, fuerza y la labor de grupo que pueda tener el equipo para desestabilizar a unos Cavs que han estado en la cuerda floja más de lo necesario. El soplido de Stephenson hace tres años, quizá sea la mejor representación de todo esto.
La serie la ganarán los Cavs 4-2, gracias a LeBron. Pero si los Pacers y Oladipo logran descifrar la defensa de los Cavs y de parar a James, muy probablemente veremos una serie pareja con altas y bajas por parte de los dos equipos.
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