Hasta no hace muchas semanas, a ambos les sonreía el destino. Barcelona y Manchester City lucían como los rivales más temidos de Europa, pero ahora en el concierto continental ya no figuran.
Catalanes y ciudadanos quedaron afuera de la Champions League de forma estrepitosa. Unos vieron como la Roma le remontaba en sus narices con un 3-0 en el Olímpico luego de un 4-1 en el Camp Nou y los otros tuvieron que sentir como los sentenciaba el Liverpool de poco a poco hasta inflarles la cara con un 5-1 global.
Los cuartos de final saben a nada en los ambiciosos proyectos de los dos clubes. Uno con el mejor jugador del mundo, Lionel Messi, y el otro con el prestigioso Josep Guardiola a la cabeza… pero ¿se les puede llamar fracaso?
Pareciera que la Champions League es el máximo indicador de qué tan buena es la temporada de un equipo. Las penas crecen cuando el torneo deja mal sabor, ni siquiera ser amplios líderes como Barcelona y Manchester City en sus ligas.
Los dos equipos, a nivel local, tienen asegurado sus trofeos prácticamente desde la jornada 20 con ideas de fútbol atractiva y con vistosidad… ¿es justo que todo esto lo borre el no poder trascender en Europa? ¿Se le da la justa dimensión a las ligas?
Parece que el despecho será fuerte en Barcelona y Manchester City pero podrán soportar penas con éxitos por venir y que seguramente serán suyos en cuestión de tiempo. La presión por ganar todo se vuelve cada vez más grande… ¿se les puede llamar fracaso?
Leave a Comment