La llegada de James Rodríguez, como fichaje pedido expresamente por el entrenador Carlo Ancelotti, abre una nueva discusión sobre la alineación titular habitual que tendrá el Bayern en la próxima temporada que no estará libre de conflictos.
Para muchos, la llegada de James es un reto y casi que una amenaza, aunque para Ancelotti el que haya lucha por los puestos titulares es algo normal en todo gran equipo.
«La competencia es la gasolina del equipo, para mí no es ningún problema sentar a un jugador en el banquillo, si el jugador no lo entiende, no es un problema», dijo el entrenador.
James llega al Bayern con el aval de Ancelotti por lo que es claro que tendrá su oportunidad para mostrar que puede ser clave en el Bayern aunque el jugador se mostró hoy consciente de que tendrá que entrar en una lucha para ser titular.
Sería está la mejor formación de Bayern con James de titular? pic.twitter.com/sR92EvoU0A
— Fabian Romero (@faropa) 12 de julio de 2017
«Hay grandes jugadores, hay que esforzarse para ganarte un puesto. Jugaré donde quiera el entrenador, puedo jugar en distintas posiciones y estaré atento a lo que el entrenador diga», dijo el jugador durante su presentación.
James tendrá que enfrentar la presión de los que se queden fuera y, si su rendimiento ofrece dudas, probablemente también del entorno que empezará a pedir el retorno al equipo titular de alguna vaca sagrada damnificada.
Es posible que el jugador más afectado por la llegada del colombiano sea Thomas Müller con lo que el goleador del Mundial 2014 estaría desplazando al goleador del Mundial 2010 que, además, para muchos es una seña de identidad del Bayern como último bávaro de nacimiento que viste la camiseta del club.
Müller viene de hacer la peor temporada de toda su carrera en lo que al club se refiere. Ancelotti lo dejó fuera de los partidos claves en Liga de Campeones, cuando no se veía obligado a recurrir a él por lesiones.
En la Bundesliga, además, Müller tuvo un curioso divorcio con el gol -sólo cinco tantos- que completó su imagen.
Si Arjen Robben y Franck Ribery juegan por las bandas, y es de esperar que así lo hagan si están bien físicamente, la posición que le queda a Müller es en la mediapunta, justamente el puesto que está predeterminado para James.
La temporada pasada, Ancelotti prefirió habitualmente Thiago Alcántara para esa demarcación, que ahora será reclamada también por James.
Con James en la mediapunta es de esperar que Thiago retrase su posición, con lo que un segundo damnificado puede ser el chileno Arturo Vidal que, en la lucha por los puestos de la titular tiene además el hándicap de llegar tarde a los entrenamientos por haber jugado la Copa Confederación.
El que con los fichajes que se han realizado debe pensar que tiene poco futuro en el Bayern es el portugués Renato Sanches. Se había hablado de que con el fin de la carrera de Xabi Alonso podía ser probado como su sucesor pero la llegada del francés Corenthin Tolisso y el posible retraso de la posición de Thiago ante la llegada de James lo hacen improbable.
El secreto de Ancelotti estará seguramente en repartir minutos con habilidad, recurriendo a pausas de refresco para Ribery y Robben, que ya se acercan a los 35 años, al margen de posibles lesiones.